Cómo cocinar pescado congelado sin descongelar
1.- Enjuaga el pescado con agua fría.
Enjuaga el pescado congelado con agua fría para quitar los cristales de hielo de la superficie. Evita el agua caliente, ya que esto puede promover el crecimiento de bacterias y saturar de agua tu pescado.
Siempre lávate las manos con agua tibia jabonosa antes de manipular pescado crudo.
Si el pescado no está destripado, usa el método de descongelación que indicaremos más adelante, luego retira las partes no comestibles.
2.- Seca el pescado.
Seca el pescado con papel toalla. Esto le quitará los cristales de hielo adicionales, además de la humedad adherida a las escamas del pescado.
3.- Usa técnicas especiales para el pescado grueso o la cocción a fuego alto.
Los cortes gruesos de pescado congelado tardarán mucho tiempo en cocinarse, pero puedes reducirlo envolviéndolos en paquetes de aluminio o bolsas de papel pergamino. Los cristales de hielo del pescado se convertirán en vapor que permanecerá atrapado en el paquete. Esto ayudará a cocinar el pescado con más rapidez. Aumentar la velocidad de cocción es sumamente importante para los métodos de cocción a fuego alto, según describiremos a continuación:
Cocina el pescado a la parrilla en paquetes de aluminio herméticamente cerrados para evitar que el exterior se queme mientras el interior se cocina.
Si vas a dorar el pescado en la sartén, no lo envuelvas. En vez de ello, tapa la sartén una vez que el pescado empiece a soltar sus jugos con el fin de atrapar el vapor que ayuda a cocinar el pescado de forma homogénea
4.- Sazona el pescado a mitad de la cocción.
Cocinar el pescado durante un par de minutos derretirá parte del hielo que cubre el exterior. Esto facilita la tarea de untar aceite, mantequilla o marinada en el pescado y de hacer que las especias se adhieran adecuadamente. Si vas a empanizar el pescado, puedes colocarlo completamente congelado en una sartén y cubrirlo con una capa gruesa de migas y especies.
5.- Cocina el doble de tiempo que tardas en cocer el pescado fresco.
El pescado congelado puede tardar en cocinarse el doble de tiempo que el pescado fresco, pero aun así ahorrarás tiempo saltándote la etapa de descongelación. Esto es solo una aproximación general del tiempo que tardará en cocinarse, ya que la cantidad real de tiempo requerido varía según el grosor del pescado. Revisa el pescado cada dos minutos y sigue estos consejos para saber cuándo el pescado ya está listo:
Haz un corte con un cuchillo afilado. Una vez cocido, el pescado estará completamente opaco cerca de la superficie y empezará apenas a volverse opaco en el centro.
Si tienes un termómetro de alimentos, cocina el pescado a una temperatura interna de 63 °C.